miércoles, 28 de mayo de 2014

El Testimonio de Esteban / Fundamentos de la Misión Mundial



Unos miembros de la sinagoga… empezaron a discutir con él. Al no poder hacer frente a la sabiduría y al espíritu con que se expresaba.
Hechos 6.9-10, BLP

Hasta aquí, la misión de la iglesia se ha dirigido solamente a los judíos, y en la región cercana a Jerusalén. Dios está por lanzarla hacia el mundo más allá, pero antes Lucas muestra que los cimientos de esa labor fueron puestos por dos hombres notables (Esteban el mártir, y Felipe el evangelista), luego dos conversiones notables (la de Saulo el fariseo, y Cornelio el centurión). Estos cuatro, más Pedro, por cuyo ministerio se convirtió Cornelio, hicieron una contribución indispensable a la expansión global de la iglesia.

Esteban era uno de Los Siete, y Lucas dice que estaba lleno del Espíritu, de sabiduría, gracia, fe y poder. Sorprendentemente, provocó la oposición de algunos judíos. Lo acusaban de hablar 'palabras blasfemas contra Moisés y contra Dios' (v. 11). Cuando lo trajeron ante el sanedrín, lo acusaron de que 'no cesa de hablar palabras blasfemas contra este lugar santo y contra la ley' (v. 13). Por supuesto, se trataba de una denuncia muy grave, ya que el templo y la ley eran las posesiones más preciosas y sagradas de los judíos.

Algunos comentaristas han criticado el discurso que Esteban pronunció ante el concilio diciendo que era aburrido, irrelevante y hasta incoherente. Pero se trata de un juicio superficial. En concreto, el argumento que los grandes personajes del antiguo testamento nunca pensaron que Dios pudiera quedar contenido en edificios construidos por hombres. Para respaldar su concepto, eligió cuatro épocas principales, dominadas por cuatro personajes importantes. Primero, Dios se apareció a Habraham en la idólatra Mesopotamia. Segundo, Dios estuvo con José en una cárcel egipcia. Tercero, Dios estuvo con Moisés en las tres etapas de su vida. Cuarto, aunque David y Salomón construyeron el templo, sabían muy bien que el altísimo no mora en edificios. Por consiguiente, el hilo común que corre a lo largo del discurso de Esteban es que el Señor es un Dios peregrino. Su presencia no puede ser confinada a un sitio preciso. Siempre está llamando a su pueblo a nuevas aventuras en las que va con ellos mientras están en marcha.

En cuanto a la ley (el segundo tema), Esteban da vuelta la acusación. No es él quien está mostrando falta de respeto a la ley de Dios, son ellos. Son '¡Duros de cerviz, e incircuncisos de corazón y de oídos!' (7.51), igual que sus antepasados. Ellos están resistiendo al Espíritu Santo y rechazando al Mesías de Dios.

Para seguir leyendo: Hechos 6.8-15
Tomado de Toda la Biblia en un Año  de John Stott.

En Jesús de Nazareth: nuestros Corazones, nuestras Mentes y nuestras Puertas, están abiertos para Dios, están abiertos a la Vida y están abiertos para Ti.